domingo, 14 de octubre de 2012

CRISIS, RECORTES Y DEMÁS INCONGRUENCIAS

Para empezar, no os voy a definir qué es la crisis, ni a deciros cuándo empezó o por qué, puesto que, si estáis leyendo esto, perfectamente sabréis buscarlo en Internet.

En vez de todo esto, os diré cómo la veo yo. Yo veo lo crisis como un gran agujero negro, un agujero negro en el que todos caemos, tarde o temprano. Incluso aquéllos encargados de agrandarlo, aquéllos que se creen que recortando se arreglan las cosas...

Hoy por hoy, poca gente habrá que no esté enterada de la situación económica, me atrevería a decir, mundial tan mala en la que nos encontramos. Y de esa gente, poca habrá que no esté siendo afectada.

Sinceramente, siento vergüenza sobre el trabajo que se está realizando por intentar parar la crisis. Primero, por los métodos utilizados. Segundo, por la horrible efectividad de dichos métodos. Más que pararla, la aumentan.

¿De verdad es necesario el recorte en áreas tan indispensables?

No hace mucho tiempo, cierta figura política tuvo que retirarse por problemas de salud. No creo que fuera ni la primera ni la última que tuvo que hacerlo. Entonces, ¿en serio es necesario recortar en sanidad?

Un escritor mencionó en su libro que le parecía indignante que los políticos no supieran hablar inglés, aun teniendo traductores. Aunque, a este paso, dejará de haberlos. Así que, ¿de veras es necesario recortar en educación?

Podemos decir que estos políticos ya han caído en este agujero negro al que llamamos "crisis". A dichas personas se las paga por realizar su trabajo debidamente, y en él se encuentra sacarnos de todo esto.

Pues bien, estamos pagando millones a personas que no hacen su trabajo. En mi opinión, no les haría daño un recorte en su sueldo, en vez de en áreas vitales. De esta forma, ni a ellos se les subiría el dinero a la cabeza, ni a nosotros se nos iría de las manos.

Pero todos sabemos que manda aquél que tiene el poder, y a pocos les haría gracia eso de recortar en su propio sueldo… Así que, por el momento, habrá que seguir esperando a quien pueda sacarnos de toda esta pantomima.